Balenciaga redefine el verano con estilo y distancia
Balenciaga desvela «High Summer», una campaña visual diseñada por Roe Ethridge.
Una visión gélida e irónica del escapismo estival.
Una estética deliberadamente poco convencional
Roe Ethridge no fotografía el verano de los sueños. Capta un verano congelado, casi torpe. Las poses son rígidas. Los rostros son impasibles. Los escenarios evocan lugares de vacaciones impersonales: piscinas vacías, habitaciones de hotel estandarizadas, palmeras sin encanto. Balenciaga secuestra los códigos del viaje para cuestionarlos.
La ropa como armadura de verano
La colección«High Summer» juega con los contrastes. Gafas de sol negras extragrandes, sudaderas oversize, bolsos rígidos… nada ligero, todo asertivo. El vestuario rechaza la comodidad clásica. Impone una silueta fuerte, casi acorazada. Balenciaga no sugiere huir, sino exponerse. Incluso bajo la luz directa del sol.
Un sentido del humor gélido pero asertivo
La campaña roza lo absurdo. Secuestra los códigos de la publicidad veraniega. Las modelos nunca sonríen. Las situaciones parecen banales, pero su tratamiento visual las hace inquietantes. Roe Ethridge destaca en esta situación intermedia. Transforma cada imagen en un comentario irónico sobre nuestra relación con el lujo y la evasión.
Una firma cada vez más identificable
Con «High Summer», Balenciaga continúa su singular narrativa visual. La casa rechaza el glamour inmediato. Prefiere la iconoclasia, la tensión visual y la incomodidad. Demna impone una visión a la moda, no sólo una tendencia. Roe Ethridge amplía esta visión con un toque de distancia y fascinación.
La campaña de verano de Balenciaga va a contracorriente, y es tan poderosa como enigmática. Para saber más sobre otras casas de moda que rompen clichés, visita parisselectbook.com.