El tacón de cuña: el icono de los 70 vuelve con fuerza

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Icono de los años 70, el tacón de cuña está de vuelta. Más esculturales, más firmes, seducen a los diseñadores más vanguardistas.

Una herencia revisitada

Asociado durante mucho tiempo a la libertad de los años setenta, el tacón de cuña evoca una suave insolencia. Alargan la figura sin agredirla.
Hoy vuelven a las pasarelas. Pero con una interpretación diferente. Menos retro, más conceptual.
Las casas de moda lo están transformando en un manifiesto estético. Se está convirtiendo en un volumen en sí mismo, casi arquitectónico.

Alaïa: la versión escultural

En Alaïa, el tacón de cuña se convierte en un objeto puro. La línea es limpia, potente y sensual. Se abrazan al pie como una segunda piel.
La casa opta por materiales nobles: cuero liso, ante profundo, plataformas de madera.
Cada par recuerda la obsesión del modisto por la forma perfecta. Aquí, la comodidad se une al radicalismo.

Courrèges: la visión futurista

Courrèges lleva la audacia un paso más allá. Las cuñas se elevan altas, muy altas, como tótems minimalistas.
El tacón se funde con la suela. El pie casi flota.
La marca ha adoptado una estética espacial, heredada de André Courrèges. Blanco lacado, PVC, formas lisas. Nada se deja al azar.
Estos zapatos siguen la línea del cuerpo. Imponen una mirada. Crean un poderoso silencio visual.

¿Por qué has vuelto ahora?

El tacón de cuña satisface una necesidad específica: comodidad + impacto visual. Te permite dominar el espacio sin dolor.
En una era post-neakers, las mujeres buscan algo diferente. Un zapato estable pero asertivo.
Este regreso es también un signo de nostalgia. La de una época en la que la moda se atrevía con la masa y el material.
Las cuñas concilian peso y ligereza. Captan el espíritu de la época, al tiempo que se resisten a lo instantáneo.

Potencia y elegancia

Los tacones de cuña no son sólo un accesorio. Encarnan una postura. Una forma de avanzar sin concesiones.
De Courrèges a Alaïa, inspiran con su fuerza silenciosa.
La moda no los recicla: los replantea. Y vuelve a imponerse como una fuerte declaración de estilo.

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