Damson Idris, entre el glamour de Hollywood y la herencia nigeriana, lanza Didris
El aclamado actor y creciente icono de la moda Damson Idris añade una nueva cuerda a su arco: la joyería. Su marca, Didris, refleja un proyecto íntimo tejido a partir de las raíces familiares, la elegancia y la memoria.
Visto por primera vez en la serie Snowfall, de John Singleton, Damson Idris se ha consolidado rápidamente como uno de los principales talentos británicos de su generación. Pronto causará sensación en la gran pantalla en la superproducción de F1 producida por Jerry Bruckheimer, junto a Brad Pitt, en la que interpreta a un joven y ambicioso piloto. Pero es lejos de los circuitos, en el silencioso mundo de las piedras preciosas, donde el actor acaba de sorprender al mundo.
Didris: una marca con ADN personal
Didris no es una marca de famosos más. Está profundamente arraigada en la historia personal de Damson Idris. La primera colección es un homenaje a su madre, Silifat Idris, a quien describe como su «heroína». Originaria de Nigeria, compró oro en su país antes de venderlo en Europa, labrándose un futuro sólido para sus seis hijos. Esta valiente e inspiradora historia de espíritu empresarial femenino está en el corazón de la estética de Didris.
Joyería entre África y la modernidad
Didris afirma su identidad africana. Sus creaciones se inspiran en los códigos tradicionales nigerianos, reinterpretados en un lenguaje contemporáneo y refinado. Joyas de oro macizo, perlas de Tahití, diamantes, esmeraldas, turmalinas… La marca favorece los materiales nobles de Namibia, Botsuana y Sudáfrica, con un enfoque centrado en las raíces y la transparencia.
Diseñadas para ser transmitidas, estas joyas cuentan una historia de resistencia y herencia. La marca atrae tanto a los entusiastas del diseño como a los amantes de las piezas con significado.
De la alfombra roja al escaparate
Fiel a su marcado gusto por los detalles y los accesorios, Damson Idris lleva varios años presentando joyas de autor que combinan la elegancia clásica con la audacia contemporánea. Con Didris, ya no se contenta con llevar joyas: se ha convertido en su creador, combinando una historia personal con la ambición artística.
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