DERRIÈRE, el brunch gastronómico de buen humor
Te invitamos a adentrarte en el mundo único de Mourad Mazouz que, a través de sus direcciones parisinas, combina lo bello, lo bueno y, sobre todo, lo insólito. Hemos probado para ti el famoso brunch de su restaurante DERRIÈRE. ¡Una experiencia original y gourmet recomendada por nuestros redactores!
Detrás: un capullo de arte y encanto
Oculto tras el bar Andy Wahloo y el restaurante 404, DERRIÈRE ocupa el antiguo piso de Mourad Mazouz, transformado en un espacio cálido y acogedor donde cada habitación se ha transformado en una zona de recepción con un toque arty. Desde el salón al dormitorio, pasando por el comedor de estilo loft neoyorquino de los años 70 y el vestidor, la decoración, diseñada por el propio Mourad, hace que parezca el hogar lejos del hogar de un amigo artista. Abundan los detalles: cuadros, carteles, libros de mesa aquí y allá, nada se deja al azar. Hasta en los aseos, donde una bañera hace las veces de lavabo. Lo más sorprendente es el misterioso armario que esconde una sala de fumadores que parece un gabinete de curiosidades. Furiosamente chic… ¡nos encanta!
En este ambiente relajado, te encontrarás con una amplia gama de estilos, edades y orígenes, desde clientes estadounidenses a parisinos de moda, desde transeúntes a asiduos, formando un crisol donde todo el mundo puede encontrar fácilmente su lugar. La magia se produce de forma natural…
El brunch del domingo: una reunión de convivencia
El brunch DERRIÈRE encanta por su sencillez y generosidad. El bufé de entrantes ofrece un abanico de sabores gourmet, productos frescos que invitan a compartir, todo cuidadosamente elaborado en casa: ensaladas o sopas de temporada, charcutería, pescados y mariscos ahumados, aceitunas marinadas y verduras crujientes, sin olvidar creaciones originales. Para el plato principal, hemos revisitado algunos platos clásicos basados en huevos ecológicos. La tortilla de queso es ligera y aireada, con un equilibrio perfecto entre suavidad y cremosidad, y los huevos Bénédicte, cubiertos con una salsa holandesa, revelan un sutil maridaje entre dulzura y sabores ácidos.
En cuanto a los postres, seguro que satisfacen incluso a los paladares más exigentes. La tarta de queso es fundentemente cremosa, con una base crujiente que ofrece un contraste irresistible. La tarta de limón y merengue es una combinación bien equilibrada de acidez, azúcar y merengue ligero. Para acompañar este festín, se sirven cafés y tés a discreción, que recuerdan el buen rollo de las cafeterías americanas.
Un ambiente decididamente informal
Entre bastidores, el ambiente es deliberadamente cordial y amistoso, el lugar es cálido y relajado. El equipo está formado por personalidades y personajes accesibles, para que juntos, cliente y personal, puedan crear esa atmósfera especial en la que te sientes «como en casa».
El lugar es ideal para una reunión dominical con la familia o amigos, dos o muchos más. En la parte trasera, puedes reservar un salón para 10 personas o más, 2 habitaciones como el vestidor y el dormitorio, o incluso un piso entero. El lugar perfecto para celebrar un evento, un cumpleaños o simplemente para reunirte con amigos en un entorno totalmente único.
Y si pasas por aquí, ¡pregunta por Gigi!
Derrière, 69 rue des Gravilliers, 75003 París.
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