Perrier-Jouët: Un interludio de la Belle Époque en Maxim’s de París
Hasta finales de año, Perrier-Jouët ofrece una experiencia de degustación única en Maxim’s. Este bar efímero pone de relieve la historia compartida de las dos casas, entre el arte y la efervescencia parisina.
Hace 55 años, Perrier-Jouët lanzó su primera cuvée Belle Époque en Maxim’s, el templo de la noche parisina. Hoy, la Casa del Champán celebra esta herencia con «La Parenthèse Belle Époque», un bar efímero en los salones privados de Maxim’s. Los salones están decorados a imagen de la Casa Belle Époque de Épernay. «Con ‘La Parenthèse Belle Époque’, estamos orgullosos de recrear el arte de vivir de este periodo histórico», dice Caroline Bianco, directora artística de Perrier-Jouët.
Una decoración inspirada en el Art Nouveau
Perrier-Jouët ha optado por traer objetos raros de su colección para recrear el ambiente único del Art Nouveau. Entre ellos se encuentran la Table Servante de Émile Gallé y un retrato del fundador de la empresa, Pierre-Nicolas Perrier, junto a la iluminación de Raoul Larche. Al mismo tiempo, la artista Samantha Kerdine expone una estela inspirada en la colección Anémone. Recuerda la emblemática flor japonesa creada por Gallé en 1902. Estos objetos subrayan el compromiso de Perrier-Jouët con el lujo atemporal y estético.
Una degustación artística y un vínculo histórico en París
En La Parenthèse Belle Époque, la degustación se convierte en un ritual. Los visitantes pueden saborear cuvées especiales, incluida la edición limitada Maxim’s Blanc de Blancs, en copas Art Nouveau creadas por vidrieros de renombre como Agustina Bottoni y Lucie Claudia Podrabska. Estas copas, expuestas para el evento, evocan la elegancia de los años de la Belle Époque. Cada pieza atrae todas las miradas, aunque los visitantes sólo puedan admirarlas sin beber en ellas.
Maxim’s, fundado en 1893 y adornado con vidrieras y murales típicos del Art Nouveau, está íntimamente ligado a Perrier-Jouët. Este bar efímero es un homenaje a París. Una ciudad de arte y modernidad, cuyo encanto y lujo han perdurado a través de los tiempos. La Belle Époque, periodo de efervescencia artística, fue el caldo de cultivo del éxito de Perrier-Jouët y Maxim’s. Al restablecer esta «Parenthèse Belle Époque», la Casa del Champán celebra una alianza duradera entre el refinamiento y el patrimonio artístico.
Hasta el 31 de diciembre de 2024, La Parenthèse Belle Époque te invita a realizar un viaje gustativo al París de los años dorados, en un marco histórico y encantador.
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