Hermès podría adquirir talleres suizos de Alta Relojería
Hermès, el grupo francés de lujo, podría dar pronto un paso audaz en el mundo de la relojería. Según la información de BFM Business, es el favorito para adquirir la división relojera de la fundación familiar Sandoz. ¡Un movimiento que podría sacudir el mundo de la relojería!
Este consorcio de talleres suministra actualmente a marcas prestigiosas como Patek Philippe, Richard Mille y Tag Heuer. La venta de esta división, que incluye empresas de renombre como Vaucher, Atokalpa y Elwin, se anunció en febrero de este año.
Una estrategia audaz para reforzar su presencia en el mercado
La adquisición de Hermès podría sacudir el panorama relojero. Aunque LVMH también ha expresado su interés en el acuerdo. Pero fuentes cercanas al asunto indican que Hermès se considera un candidato más tranquilizador. Hermès ya posee desde 2006 el 25% de Vaucher, uno de los talleres de esta división relojera. Esto refuerza su legitimidad en este sector.
Esta operación podría marcar un punto de inflexión en la estrategia de Hermès para aumentar su influencia en el mercado de la relojería. Durante mucho tiempo, Hermès fue considerada una outsider en este campo. No se incorporó al mercado hasta finales de la década de 1970. Sin embargo, la marca disfruta ahora de un crecimiento impresionante, con un aumento del 23,6% en el primer trimestre de 2023, hasta 166 millones de euros.
Un mercado bajo presión
Sin embargo, la adquisición podría tener lugar en un contexto difícil. La industria relojera suiza, aunque próspera, atraviesa un periodo difícil. Las exportaciones de relojes suizos a China han caído un 21,1% desde enero, mientras que las destinadas a Hong Kong han descendido un 18,6%. Esta preocupante tendencia ya ha llevado a algunas empresas a plantearse el trabajo a jornada reducida o los despidos, según la Federación Patronal de la Industria Relojera Suiza.
A pesar de estos retos, el sector sigue siendo sólido en general. En 2023, las exportaciones de relojes suizos alcanzarán los 26.700 millones de francos suizos, lo que confirma el atractivo duradero de este mercado. Si Hermès consigue completar esta adquisición, no sólo podría consolidar su posición, sino también redefinir su papel en un sector en constante evolución. Este audaz movimiento bien podría anunciar una nueva era para la casa de lujo, reforzando su compromiso con la innovación y la excelencia artesanal.
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